Cuentan que sucedió en el Carnaval de 1853 Eran las fiestas de carnaval del año 1853. En los salones del Teatro Real se celebraba el tradicional baile de máscaras al que había sido invitado un joven diplomático extranjero. El joven se sentía un tanto desplazado hasta que, de repente, una hermosa mujer, con una cara muy pálida y los ojos ocultos tras un antifaz, se sentó junto a él. La joven, que llevaba una rosa blanca en la mano, tenía ganas de hablar y enseguida…