Un Buen Día en El Rastro
Domingo tras domingo nos levantamos temprano para patearnos el mercadillo madrileño más famoso y tomamos nota de qué cosas podemos hacer, comprar y ver en las concurridas calles que recorren El Rastro en el barrio de La Latina.
Nos encanta hacerlo por dos motivos: el primero es que lo pasamos en grande (ya veréis por qué cuando terminemos este post, pero os adelantamos que tiene poquito que ver con las compras). Y, el segundo es que nos encanta poder orientar a aquellas personas que aún no han tenido la ocasión de visitarlo, para que lo disfruten tanto o más que nosotros. ¿Preparado o preparada para hacer de un domingo corriente un gran plan?
Como buen punto de encuentro, tomamos como referencia el monumento dedicado a Eloy Gonzalo en la Plaza del Cascorro. ¡Ojo! No es el itinerario oficial, puedes comenzar el rastro desde otros puntos, pero a nosotros nos gusta hacerlo desde aquí, puesto que está es la parte alta del rastro, y el paseo se hace más agradable bajando las calles que subiéndolas, ¿no crees?
Las mejores curiosidades para ver
1. Las tiendas de antigüedades de «Nuevas Galerías» y la Plaza de Vara del Rey
Como hemos empezado nuestra ruta por Cascorro, es normal que te preguntes: ¿dónde están las antigüedades de las que todo el mundo habla? Aquí solo hay puestos de bolsos, camisetas, gafas… Lo cierto es que tienes que descender un poco Ribera de Curtidores (la calle más famosa del rastro) para toparte con el auténtico mercado de pulgas (nombre con el que se conocía antiguamente al rastro).
Este oasis de ropa usada, de cosas viejas y de cachivaches, se hace llamar Plaza de Nuevas Galerías. Os invitamos a dar un rodeo por esta plaza a mitad del mercadillo. Es curioso porque este pequeño lugar pasa desapercibido. El acceso es desde la Calle de la Ribera de Curtidores, 12.
Ahora bien, hay otra plaza que es imprescindible pisar antes de abandonar el rastro. Está un poco apartada del eje central, pero si callejeas y sigues el bullicio de gente, seguro que llegas fácil allí. Se trata de La Plaza del General Vara del Rey, donde las pequeñas tiendas que allí descansan, sacan sus puestos a la calle para ofrecer sus mejores bártulos. ¡Quién sabe! Rebuscando, rebuscando quizá encuentres hasta un garfio que perteneció al mismísimo capitán James Hook de Peter Pan. ¡Sí! Nos referimos al capitán Garfio.

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
2. Rincón para los coleccionistas de cromos
Antes o después de buscar antigüedades varias, tienes que vivir en primera persona el ritual de intercambio de cromos, que se lleva dando desde hace muchos años en la Plaza del Campillo del Mundo Nuevo. Cualquier madrileño que se precie es conocedor de esta práctica, porque se la hayan inculcado sus padres o sus abuelos desde bien pequeño. De hecho, no es de extrañar encontrar aquello lleno de padres con niños y abuelos con nietos, buscando el mejor intercambio para conseguir completar su lista.
Para que puedas acceder bien a esta plaza, te diremos que está situada a la derecha de Ribera de Curtidores, y se puede llegar desde la calle Mira el Sol, o desde la Ronda de Toledo. Prepárate para sacar toda la artillería pesada, los cromos del Madrid más cotizados, o aquellos que tengas “repe” en tus álbumes, de cuando eras pequeño, o de los que coleccionas ahora de extranjis, ¡todo vale! Hasta los cromos de Fornite. Si lo que quieres es encontrar revistas antiguas, posters o películas en VHS, esta plaza también te va a atrapar. ¡Te lo advertimos!

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
3. Músicos callejeros y estatuas vivientes
El rastro no sería lo mismo sin todo ese talento suelto por sus calles, ¿estáis de acuerdo? Y es que en el rastro no hay ruido, hay melodía… Por mucho murmullo que se escuche, y mucho grito suelto de “2×1”, lo que realmente destaca y se hace notar, son esas melodías que nos ofrecen los músicos callejeros que allí se instalan.
Además, tu visita al rastro puede convertirse en un juego de niños, buscando entre la multitud esos personajes populares que ya forman parte de la historia del mercadillo. Hablamos de la organillera que siempre se pone cerca de la Plaza del Campillo del Nuevo Mundo, o los africanos que cruzan Cascorro en dirección a Tirso de Molina, cantando y tocando instrumentos de percusión.
Otra cosa que nos llama la atención en el rastro son sus estatuas vivientes. A nosotros ya no nos dan gato por liebre, pero es gracioso ver como los turistas se asombran cuando ven algunas de estas estatuas. Puede que estos artistas lo hagan para animar el ambiente, o puede que sea para que los espectadores dejen su propina. Lo que está claro es que un rastro sin ellos no sería ni parecido.
Los chollos más originales que comprar
4. Peletería en plena calle
Algunas tiendas situadas en la Rivera de Curtidores aprovechan los domingos para sacar a la calle sus artículos. En sus puestos se ven carteles de ofertas únicas, pero es que, además, el regateo es posible. Desde luego, tienes aquí la oportunidad perfecta para llevarte a casa una prenda de piel a un precio nada desorbitado. Tienes de todo, abrigos largos, cortos, de piel de zorro, de visón, de astracán… Eso sí, adivina primero en que puestos los abrigos son nuevos, y en cuáles son de segunda mano, más que nada por si lo que te gusta es estrenar quitando etiquetas.
Aunque no vayas a comprar nada, te recomendamos que eches un ojo por estos puestos, es impresionante ver tantas piezas de piel juntas. ¡Te lo aseguramos! Y, también es impresionante como huele toda la calle. Eso sí, advertimos de que este lugar no es agradable para aquellos que defienden a los animales y critican a la industria peletera.
5. Complementos de camuflaje del ejército
Otros puestos que no pueden pasar desapercibidos en tu visita son aquellos que ofrecen todo tipo de saldos y complementos del ejército. Hay dos puestos en concreto que se dedican a vender principalmente material alemán. También puede que veas por allí algo del ejército suizo o uniformes británicos y holandeses. Aunque te advertimos de que el stockage de estos puestos suele cambiar con frecuencia. De hecho, hemos visto en ellos hasta máscaras de gas como las que salen en las películas.
Si te quedas con ganas de más, bajando la calle Rivera de Curtidores es posible que encuentres emblemas de cuerpos británicos o americanos. Aunque la guinda del pastel la encuentras en las tiendas Rangers a la derecha de esta misma calle: chalecos tácticos, ceñidores y mucha uniformidad española. El que quiera o la que quiera iniciarse en esto, tiene aquí su criptonita. Aunque, quién sabe, lo mismo entre tanto artículo militar encuentras algo para carnaval.

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
6. Puestos con el mejor 2×1 o 3×2 y ofertas varias
Ya hemos dicho que algún grito de 2×1 se colaba entre la clásica melodía del barullo del rastro. Algún 3×2 a lo lejos también es posible, y es que el rastro es el lugar idóneo para encontrar chollos de todo tipo. Desde ropa de segunda mano, pasando por calzado, complementos… hasta muebles, juguetes y otros objetos inimaginables.
Lo mismo vas paseando por alguna de sus calles y te enamoras de una camiseta que cuelga dando vueltas por la brisilla de la mañana y de pronto te dice el tendero que has encontrado un 2×1. O, te suelta un precio desorbitado y mediante regateo y negociación con un poco de suerte le bajas algunos euros.

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
7. Cantidad de artesanía en cuero y cerámica
Artesanía en el rastro no falta. Como tampoco faltan los puestos de joyería fabricada a mano o bisutería. Son muchos, pero créenos cuando te decimos que no te cansas de verlos. Sobre todo, porque sabes que ningún puesto será igual que el anterior y que en cada uno de ellos encontrarás piezas únicas que ninguna otra persona tendrá jamás exactamente igual.
En la línea, encuentras también multitud de puestos de artículos fabricados en cuero: bolsos, cinturones, mochilas… Incluso, puede que tenga suerte y haya algún artesano manos a la obra en directo haciendo alguna pulsera que luego ponga a la venta.
Aunque, con artesanía también nos referimos a cerámica. Ahora que está de moda lucir tus platos o tus bowls en Instagram con los alimentos bien colocadito a modo de postureo (aunque todos sabemos que antes de dar el primer bocado lo mezclas todo), te vendrá bien echarles un ojo a las piezas únicas de cerámica que por aquí se dejan ver.

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
8. Puestos que ofrecen una decoración original para la casa y para vestir
Visita obligada obligadísima es La Tapicera, sobre todo si tienes esa vena artística que te motiva a decorar tu casa a golpe de DIY. La Tapicera es un estudio de diseño gráfico y de interiorismo en el que puedes encontrar telas con los estampados más arriesgados, raros, locos o curiosos de todo Madrid. Pero ¡ojo! Quién dice raros dice únicos y originales. Pásate por la calle de Santa Ana porque los días de rastro sacan muchas de sus creaciones a la calle y puedes encontrar desde un cojín con un estampado super original hasta una butaca de esas antiguas restaurada que quedaría ideal en el salón de tu casa.
Aunque, para decorar tu casa, este lugar no es el único. Durante todo el recorrido del rastro puedes sorprenderte con gangas de decoración varias. Lo mismo pasa con la ropa, tienes de todos los gustos, colores y sabores. Solo es cuestión de tener paciencia y encontrar las prendas que más te gusten y con los mejores precios.

Fotografía cedida por @horteradeboleraconarte
La mejor parada para recuperar fuerzas
9. Yes! Hamburgers, smash burgers para reponer tu energía
En plena glorieta de Embajadores nos encontramos con YES! Hamburgers, justo donde nace El Rastro (o al menos en uno de sus nacimientos). Al más puro americano, con sofás fijos de piel y 6 hamburguesas smaheadas en su carta que te quitarán el suspiro, es la opción perfecta para terminar el plan de domingo de Rastro. Otra cosa que destaca en su carta son sus famosos batidos americanos, sobre todo el de peanut butter.
En este establecimiento ponen el foco en la calidad del producto, tanto en su carne, de origen nacional, proveniente de Galicia y en su pan, tostado con mantequilla y ofreciéndole una jugosidad perfecta. Nosotros visitamos su local hace unos meses y nos encantó. Y si tenéis alguna duda de esto, aquí os dejamos la prueba del delito:
Dónde: Paseo de las Acacias, 4.
Más información: Nuestra experiencia | Instagram.
10. Terminar la mañana con tu grupo de amigos comiendo en alguno de los múltiples bares y restaurantes de ofrece el barrio de la Latina
El más famoso es El Capricho Extremeño, pero rodeando el rastro existen mil y un sitios para sentarte tomar birras con tus colegas, vinos, sidras o lo que más os apetezca. Acompañado o no acompañado de algo de papeo, eso ya lo decidís vosotros teniendo en cuenta el hambre que os haya podido dar la caminata del rastro.
Algo que es obligatorio de un buen madrileño es comer cocido el domingo, ¿y qué mejor que un buen sitio para hacerlo después de pasar la mañana en el Rastro? Aquí te dejamos 10 sitios donde disfrutar de un buen cocido.
Como si luego os queréis quedar por el barrio de La Latina tomando unos cubatas en La Potente o unos cócteles en el 47. Por supuesto, es opcional, pero un buen día en El Rastro no es un verdadero buen día si no se finaliza por todo lo alto.