Lo que aguardan sus pictóricas paredes
¡Arza y que dale! el mítico restaurante de Letras, El Rincón de Esteban, sorprende para esta primavera anticipada una carta de categoría que posiciona a la cocina española tradicional a lo más alto; además de otorgar a los comensales que por este acuden, por un producto de mercado que derrite al paladar; y como no, que demuestra el porqué de ser uno de los restaurantes legendarios del ecléctico Madrid.
El Rincón de Esteban, sala principal.
En plena calle de Santa Catalina, frente al Congreso de los Diputados; este restaurante se ubica en un emplazamiento formidable, que invita, antes y después, de poder pasear por las pictóricas e históricas calles del Barrio de Letras, así como saborear del casticismo capitalino. Sin duda, El Rincón de Esteban, es uno de esos clásicos que tres generaciones que transiten Madrid conocen a la perfección; así como el templo culinario que todo turista debe visitar para entender la cultura gastronómica española.
Una carta donde destacan los entrantes o para compartir, primeros y segundos. En el apartado de pescados, los profesionales de este gentil restaurante trabajan con el género del día, por lo que podrás disfrutar de lo que en este momento esté a su disposición, garantizando pues, cien por cien, calidad.
El Rincón de Esteban, sala principal.
Desde sus ya clásicos pimientos rellenos de bacalao; a, sus croquetas de jamón con salmorejo; almejas a la marinera con salsa verde, que están para chuparse los dedos; o el pulpo a la parrilla con revolconas. También la tortilla española como dios manda, es un must en entre los platos a compartir.
Torreznos.
Ensaladas de todo tipo, que acompañan con un buen pescado como la dorada a la espalda; el rape; o la merluza. Así como, la ventresca de bonito a la parrilla con bilbaína; las cocohas de merluza al pil pil; o unos sabrosos chipirones al limón que encajan con solera.
Chuletillas de conejo fritas con patatas.
En las carnes y aves, El Rincón de Esteban demuestra ser todo un todoterreno; y es que si por este acudes, podrás disfrutar desde un buen solomillo de añojo a la parrilla; al entrecotte de vaca gallega; la perdiz toledana; o las afables chuletillas de conejo al ajillo con tomillo y sésamo. También los arroces y la pasta guardan un importante apartado como buen restaurante de cocina tradicional española. Propuestas como, el canelón de rabo de toro; al arroz negro de chipirones o paella.
Arroz negro con chipirones.
Por último, en el apartado de postres de este hermoso restaurante que cuenta con infinidad de fotografías con lo mejorcito del panorama nacional e internacional que por este han pasado; entrarás, desde la archiconocida tarta de queso de la reina; a proposiciones auténticas tales como, la torrija a la madrileña con leche de coco y espéculos; leche frita con salsa toffe y helado de vainilla; o los profiteroles rellenos de crema con chocolate caliente. Ni más ni menos que un placer de los cinco océanos que inaugura la sobremesa con un buen orujo elaborado artesanalmente; y que, junto al buen vino, brindan una velada de lo más apasionante.
Torrija con pan de brioche y helado de vainilla.
¡Arraigo, carácter y tradición! Esos son algunos de los apelativos que este virtuoso restaurante, que ha marcado historia en Madrid, puede ofrecer a los transeúntes que se animen a degustar su fina y sofisticada cocina.
Datos de interés:
Dirección: Calle Santa Catalina, 3. 28014, Madrid.
Cómo llegar: Metro Sol, y Antón Martín.
Horario: de 12.30 horas a 00.00 horas. No cierra al mediodía.
Precio medio: de 50 a 60 euros por persona.
