El templo del nigiri
Si como yo, sois amantes de la comida japonesa, hoy estáis de suerte, porque me he propuesto haceros la vida un poquito más sencilla. Así que ante la nueva «plaga» de restaurantes japoneses (sólo en TripAdvisor aparece una interminable lista de nada menos que 258) en los que no sabes si estás comiéndote un nigiri o las sobras del arroz de anteayer con algo por encima, ¡he decidido traeros uno de verdad!
Y como con el tiempo (y con mucha práctica) he aprendido a diferenciar los buenos japoneses, de aquellos no tan buenos, hoy os presento Ikigai, antiguo Wasabi & Roll con una imagen renovada, mucho más acorde con la propuesta gastronómica, y que por supuesto encaja en la primera selección, la de los japos auténticos.
De hecho, aún situándose puerta con puerta junto a un durísimo competidor (Miyama Flor Baja), Ikigai ha conseguido salir adelante y hacerse un hueco entre aquellos fieles a la gastronomía nipona gracias a una excelente relación calidad-precio, así como al increíble trabajo de Yong wu Nagahira y de todo su equipo dentro y fuera de la cocina, haciendo que el cliente se sienta como en casa y disfrute del talento de este jovencísimo chef.
Y aunque disponen de multitud de propuestas para todos los gustos, desde aquellas más tradicionales hasta las más atrevidas, la joya de la corona son sin duda los nigiris en todas sus formas y colores. Así que pongámonos manos a la obra y empecemos como merece, con un surtido variado de nigiris. Entre ellos encontramos varias piezas que nunca faltan como las de toro, atún, o salmón, y otras dos que se salen un poco de la propuesta habitual como son los de setas shitake y los de concha fina.De ahí pasamos a la siguiente sorpresa. Y aunque en este caso no se trata de un nigiri, ¡es una auténtica delicia! Hablamos de la Tempura de ostras con ponzu, salsa kimuchi, shichimi y cebolleta (8,00€/2 unidades). Un bocado original, súper sabroso, y que te dejará con ganas de más.
¡Y aquí es donde de verdad empieza la fiesta! Que inauguran los Nigiri de vieira con foie, fresa liofilizada y sal maldon con reducción de salsa de anguilas, y huevo hilado (8,00€/dos unidades) ¡Espectaculares! Y es que el foie en los nigiri nunca falla, y conjuga perfectamente con pescados y mariscos como por ejemplo el atún, o en este caso la vieira.
De ahí pasamos a otra propuesta un porquito diferente: los de Nigiri de sardina ahumada, tapena de tomate y olivas, physalis en salmuera, con salsa de buta kakuni (5,50€). ¡Súper originales! De hecho podríamos hablar de un guiño al socorrido bocata de sardinas con tomate en su versión más
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Le siguen los Nigiri de pez escolar, también conocido como pez mantequilla, con miso dulce flambeado (5,50€/dos piezas). Suaves, ligeros, y muy equilibrados, ya que este pescado es una delicia pero es muy sutil, así que es mejor probarlo sin muchos artificios que acaban escondiendo el sabor.
Y hacemos la parada carnívora de la velada para probar un plato cuya presentación ya merece la pena: los nigiri de solomillo wagyu al humo. Fuera de carta y que les animamos a incorporar por su originalidad y por ese sabor ahumado que tanto nos gusta y que hace aún más especial una carne que ya de por sí está considerada una de las más selectas del mundo.
Y llegamos a los que para mí son sin duda la estrella de la casa: los Gunkan de salmón, ikura, yema de huevo de codorniz Ikigai (8€/dos piezas). Una auténtica explosión de sabores que se funden en tu boca y que harán que no quieras probar nada más para seguir saboreándolos por siempre. De hecho el problema que esconden este tipo de nigiris es que las comparaciones son odiosas y tras probarlo, no querrás probar ningún otro.
Pero lo mejor es que tras esta increíble secuencia de nigiris, en Ikigai no se dan por vencidos y quieren seguir sorprendiéndonos. Lo consiguen con otra de sus especialidades: sus elaboradísimos makis creativos y sus uromakis. En nuestro caso probamos el Soft Shell crab, hecho a base de cangrejo de concha blanda tempurizado, aguacate, cebollino y tobiko, con salsa cremosa de wasabi (15,95€). ¡Un espectáculo! Pero te animo a que consultes la carta y vayas tachando, porque todos ellos merecen la pena.
Y de postre, nos resistimos a abandonar el sushi… así que nos permiten hacer un trueque y cambiar la propuesta dulce por unos gunkan de crema ácida con cebolleta y foie, con una salsa de anguila. Porque, ¿de qué mejor manera podríamos despedirnos de este cenorrio si no es con otro pedacito de japón en un bocado?En definitiva, no te lo pienses mucho más y acércate a conocerlo. Déjate aconsejar por Isabel Caballo, jefa de sala y la persona con la memoria más prodigiosa que haya conocido jamás (si repites y tienes la misma facilidad para olvidar que yo, no te preocupes que ella recordará todos los platos que pediste para que no repitas -o sí!-). Y por supuesto, disfruta con cada creación del talentoso chef Yong Wu Nagahira, que se acompaña de Héctor Ydrogo, al que debemos el toque peruano de la carta con propuestas como el ceviche de lubina o el tiradito de vieiras, y de J. Michael Monis.
Datos de interés
Qué: Ikigai, auténtica cocina japonesa en el corazón de Madrid
Dónde: Calle Flor Baja, 5 (entre Plaza de España y Santo Domingo)
Horario: Todos los días de 13:30 a 16:00 h y de 20:30 a 23:00 h.
Precio: 20-30€. *Disponen de distintos menús (aquí puedes consultarlos)
Contacto: ️ 916 22 63 74 / info@restauranteikigai.com
Más información: Web, Facebook, Twitter o Instagram.
¿Sabías qué?… Ikigai significa “la razón de ser o vivir”. Un nombre que se basa en «la mezcla de ingredientes, el arte y la sutileza de Japón» que ofrece cada nuevo plato que se incorpora a la carta del restaurante.
- Soft Shell crab
- Detalle de las lámparas
- Isabel Caballo, al frente de la sala
- Chawanmushi
- Gyoza de sobrasada
- Tartar de toro con erizo y trufa