Desde hace años organismos internacionales, autoridades sanitarias y nutricionistas vienen recomendando el consumo diario de frutas y verduras como aportación esencial al mantenimiento de nuestra salud. Ya no hay duda. Una correcta o deficiente alimentación influye en la conservación o deterioro de nuestro organismo.
Una dieta inadecuada como la presente en el modo de vida actual está en el origen de diversas patologías. Esto llega al punto de que algunos estudios cifran en nada menos que un 30% los casos de cáncer estrechamente relacionados con trastornos de la nutrición.
Hay cosas que no podemos controlar. En cambio, somos libres de elegir otras. Entre ellas está la alimentación. Y ha quedado probado que comprar frutas y verduras de calidad ejerce un efecto decisivo en nosotros. A fin de cuentas «somos lo que comemos».
Las frutas y verduras son fuente de micronutrientes que ayudan a las células del cuerpo a resistir la oxidación que experimentan. Concretamente, neutralizan los radicales tóxicos causantes de su envejecimiento. En otras palabras, nos mantienen jóvenes durante más tiempo.
Por qué comprar fruta y verdura de calidad
Aceptado el hecho de que los productos de origen vegetal han de situarse en la base de la pirámide nutricional, la siguiente cuestión que se nos plantea es si cualquier tipo de fruta o verdura sirve. La respuesta es no, al menos no en la misma proporción. Ya sabemos que si la fruta y verdura en cuestión está enlatada contendrá aditivos, sal, azúcar… ¿Pero y la fruta y verdura que compramos embolsada o a granel en el supermercado?
En un mundo globalizado como el nuestro es sencillo conseguir género de procedencia vegetal a lo largo del año. Es cierto que hay alimentos que se adaptan mejor que otros a cualquier clima, y por ello podemos disponer de ellos sin necesidad de importación. Hablamos, por ejemplo, de ciertas hortalizas como zanahorias, calabacín, cebollas, rábanos, patatas, calabaza, lechugas o espinacas. También de frutas como la manzana, el plátano o el tomate.
Sin embargo, hasta esta fruta y verdura de producción nacional presenta menor calidad y mayor precio si no se encuentra en su temporada.
Después tenemos frutas y verduras estrictamente de temporada. Eso significa que es durante su temporada cuando debemos consumirlas si queremos aprovechar todo el aporte energético, proteico y vitamínico que encierran.
La reflexión es la siguiente: puesto que las frutas y verduras conservan el máximo potencial cuando maduran en árbol o mata, es decir, cuando están en temporada, hemos de tener la certeza de que la fruta y verdura que estamos comprando es realmente de temporada.
Comprar naranjas de calidad
Tomemos como referencia la naranja. La naranja es rica en vitamina A, B, C, fibra, betacarotenos, flavonoides, potasio o calcio. Tiene propiedades antioxidantes, reduce el colesterol, protege la función cardiovascular, regula la tensión arterial, fortalece el sistema inmunológico, favorece el tránsito intestinal…suma y sigue.
Las naranjas en España gozan de prestigio mundial a través de los cultivos de la huerta valenciana. ¿Crees comprar naranjas de Valencia cuando vas al supermercado? Si te fijas en su etiquetado, verás que este no es suficientemente claro. Considera que parte de las naranjas y de la fruta y verdura que compras y que se distribuye en las cadenas comerciales fue producida en el extranjero (Argentina, Chile, Marruecos…).
Por supuesto, esta fruta y verdura está sometida a normas menos estrictas que las que imperan en la UE, por eso no puedes asegurarte de estar comprando fruta y verdura de calidad. Desde su recolección, estos alimentos han viajado miles de km en cámaras frigoríficas y han sido sometidos a tratamientos artificiales.
Así pues, ¿pueden mantener el valor nutritivo de frutos recién recolectados? La respuesta es obviamente no.
La temporada de naranjas en España comienza a finales de octubre, y termina a más tardar en junio. Alrededor de nueve meses durante los cuales los árboles van produciendo diferentes variedades de naranja: naranjas Navel de enero a mayo, naranja Navelate de enero a marzo, o las tardías Lane Late, cuya cosecha se prolonga hasta mayo.
Otros tipos de naranja, como las naranjas sanguinas o las naranjas blancas, que son las que recomendamos como naranjas de zumo, cuentan con una subvariedad que puede recogerse en el mes de junio o julio excepcionalmente.
Pese a que la mayoría de meses del año habrá naranjas de la época, no podemos comprar naranjas en agosto o septiembre.
Si las encontramos en el supermercado es porque no son frutos de producción nacional y han recorrido largas distancias desde su lugar de origen o fueron cogidos del árbol antes de su maduración. Tuvieron que ser almacenados en cámaras frigoríficas y tratados artificialmente para que las cadenas de distribución estén abastecidas.
Esa es la mejor muestra de que priman las razones comerciales sobre las nutricionales, ya que las naranjas, igual que otras frutas y verduras que no corresponden a criterios estacionales, pierden muchas de las propiedades con las que cuentan. Para asegurarte de recibir naranjas de temporada con el máximo de sus propiedades, te recomendamos comprar naranjas online.
Cómo comprar en Frutamare
Internet ha abierto nuevas puertas a las transacciones comerciales. De la misma manera que podemos elegir de qué manera alimentarnos, podemos escoger medios de compra que garanticen recibir un género de calidad.
Nuestros agricultores han creado en los últimos años plataformas de venta electrónica de las frutas y verduras que cultivan. Frutamare es una empresa afiliada al gremio de productores valencianos y una de las más destacadas del sector, donde nos hemos labrado la reputación de servir mercancía de primerísima calidad.
Cultivamos en nuestros campos de la Terreta, regamos con agua de nuestros propios pozos, realizamos análisis constantes del suelo, elaboramos planes de fertilización y de abonado y llevamos a cabo una recolección casi artesanal de sus cítricos. Tan pronto recibimos un pedido a través de nuestra frutería online, seleccionamos la fruta que ha madurado en la planta.
Como hemos explicado, escogemos diferentes variedades de cada fruta y verdura, las mejores en cada momento según la estación. Hecho esto, en un plazo promedio de 24 horas enviamos el pedido al cliente. Sin químicos, ni cámaras frigoríficas… nada que interfiera en los ciclos naturales. Estás en disposición de comprar fruta y verdura fresca en una tienda online de confianza.
Fruta y verdura que ha ido directamente del árbol a tu casa, y que en consecuencia mantiene todos los beneficios nutricionales. Sin intermediarios. A un lado tú, al otro el agricultor. Tanto ellos como tú os libráis de las ataduras de la industria alimentaria, que coloca el interés de distribución y venta por encima de la calidad. En cambio, en Frutamare encuentras tu sitio en el que comprar fruta y verdura de calidad con todas las garantías.