Una (aplaudida) vuelta a los orígenes
En el mundo restaurante, como en todo, hay opciones seguras con las que suele ser complicado fallar. Es el caso de Prístino, que, desde su apertura a finales de 2019, ha conseguido convertirse poco a poco en un referente gastronómico en Madrid. Y eso que no ha sido un año precisamente fácil.
¿Las claves para conseguirlo? Su mismo nombre lo indica. PRÍSTINO. Puro, inalterado, original. Una apuesta por la cocina tradicional y los guisos de toda la vida, cuidando al máximo la calidad del producto. Con la inteligencia de saberlo adaptar a los tiempos que corren, introduciendo ciertos toques contemporáneos con los que consiguen contentar a todos los públicos.
Todo ello en un local súper amplio y luminoso, situado en uno de los edificios más históricos y clásicos del distrito de Chamberí, con una terracita ideal para los meses que vienen. Y con una cuidada y cercana atención por parte del personal, que te invita a sentirte como en casa.
Así que aprobada la primera impresión, ¡Pasemos a la carta! Y lo hacemos lanzándonos de lleno a por sus Torreznos con Patatas Revolconas (9,00€), que se han vuelto un imprescindible de la casa. Y entendemos por qué.
Aunque tienes opciones para todos los gustos, que además puedes pedir en formato media ración (¡nos encanta para probar más cosas). ¿Qué te recomendamos? Las Alcachofas Confitadas (3ud) (10 €) son un aciertón, o la Ensaladilla de toda la vida (9 €); que es de toda la vida, pero de las buenas.
Nos quedamos eso sí con ganas de probar sus Croquetas melosas (9 €), sus originales Huevos rotos con Lomo y Carabinero (12 €), o alguno de sus platazos de cuchara. Pero es imposible poder con todo y siempre hay que dejar una razón para repetir.
Para los segundos, a Prístino no se le resisten ni las carnes ni los pescados. Así que te aconsejamos que pruebes de todo.
En el apartado «Mar» nos morimos con su Rape de Ración a la Brasa (23 €). ¡Excelente opción! Muchas veces la clave está en la sencillez; y este es un gran ejemplo. Si la materia prima es buena y se consigue el punto perfecto, la baba está asegurada. Aquí lo está…
Y para las carnes, otra de las estrellitas de la casa es su Rabo de Toro sobre Parmentier de Oloroso (16 €). Aunque también tienes otras opciones como el Steak Tartar de Ternera (20 €), que si eres fan, es una gran opción, o el Cachopo de cecina e idiazábal (24 €). Así como clásicos que no fallan como el chuletón, la pluma ibérica, o las chuletitas de cordero.
En apartado postre, nos decantamos con éxito por su Tarta de queso (6’5 €). Fuertecita gracias a la variedad de quesos (Idiázabal, azul, cabra y queso crema), pero ligera y jugosa. ¡Muy, muy recomendable!
Y como una buena comida tradicional, no puede terminar con unos buenos chupitos. Orujo, crema o pacharán. Porque como PRÍSTINO, los clásicos nunca fallan. La buena cocina tradicional no pasa de moda. Y a veces lo más arriesgado es volver a lo de siempre, lo más castizo, auténtico… Cuando se hace bien, ¡no falla!
Datos de interés:
Qué: Prístino, nueva casa de comidas contemporánea
Dónde: Paseo de Eduardo Dato, 8 (Núñez de Balboa – Iglesia)
Precio: precio medio 35 €
Horario: de 13 a 16h y de 20 a 00h. Cierra domingos noche
Contacto: 91 737 36 40