Mama Campo, la revolución de la cocina ecológica

El campo en tu paladar

El campo: tranquilidad, naturaleza, la huerta, sabores de toda la vida… un poquito de todo eso es lo que quiere transmitir Mama Campo, un restaurante de comida ecológica que acerca a la gente de la ciudad al campo a través de productos sanos y procedentes directamente de pequeños agricultores y ganaderos.

Mama Campo, la revolución de la cocina ecológica - Un buen día en Madrid

Carrilleras estofadas sobre crema de patata y coliflor y fruta confitada

Mama campo se compone de tres espacios alrededor de la plaza de Olavide: un restaurante de comida ecológica, un colmado con todo tipo de productos ecológicos y un espacio infantil donde los más pequeños aprenden a cocinar sus primeros platos y a comer sano mientras se divierten!

frutas y verduras de temporada del colmado

Dentro del colmado encontramos productos imprescindibles en cualquier cesta, como la fruta y verdura de temporada; en estas fechas no pueden faltar unas buenas legumbres para esos platos de cuchara tan reconfortantes. Huevos de corral, distintos tipos de mieles naturales como la miel con romero, azahar o a las mil flores, variedad de panes elaborados por Javier Marca que por cierto, están buenísimos; bebidas vegetales como la de aloe vera, unos pimientos rojos ecológicos asados o quinoa.

detalle interior Mama Campo

Es cocina de toda la vida pero renovada, con un toque moderno. Nosotras probamos la crema de calabaza y naranja con semillas de sésamo negro (los cítricos le dan un toque diferente) , una ensalada de queso de cabra y tomates confitados en jengibre que es muy recomendable, una escabeche de verduras y pollo (es un plato muy vistoso que recomiendo probar, tiene un sabor muy particular pues contrasta el dulce de las verduras con el ácido del escabeche), bacalao (de pesca sostenible) con pisto y espuma de romero, carrilleras estofadas sobre crema de patata y coliflor y fruta confitada, chocolate y olé (nos pareció impresionante, una especie de mousse de chocolate muy muy densa con un toque de naranja y recubierto de pistacho y granada) y una macedonia de frutas especiadas (cada fruta toma el sabor de alguna especia: canela, vainilla, anís estrallado…)

Escabeche de verduras y pollo

Además de comidas y cenas también ofrecen desayunos y meriendas.

El restaurante, decorado con tonos tostados y claros crea, junto a los muebles, un ambiente que acorde con la filosofía del restaurante, es sostenible, curioso y transmite tranquilidad desde el suelo hasta el techo (de la cooperativa de bioconstrucción Qatay). Apuesta por el diseño, para ello ha contado con grandes colaboradores que lo han hecho posible, como Pablo Limón, Carlos Villoslada, entre otros. No dejeis de visitar el baño y sus geniales manillas para abrir el grifo!

Vale la pena descubrir este restaurante al que seguro querrás volver!