Ana la Santa

Un oasis con vistas al Barrio de las Letras

La Plaza de Santa Ana es el corazón del Barrio de las Letras. En su reducido espacio se mezclan cultura, arte y el clima relajado de una copa al aire libre después de trabajar. Sus terrazas son una tentación para cualquier paseante. Y en Un Buen Día en Madrid hemos encontrado el rincón más especial de esta encantadora plaza: Ana la Santa, observatorio de la noche madrileña y restaurante de alta calidad.

Roll de aguacate con tartar de salmón

El ambiente de Ana la Santa es un reflejo de la vida de la plaza que le da nombre: su jardín interior es un lugar acogedor de estilo elegante, donde la tranquilidad acompaña a una comida tradicional preparada a la manera de la alta cocina.

Es muy difícil escoger solo una o dos de sus tapas, porque todas podrían convertirse en tus favoritas. Las croquetas, por ejemplo, son casi obligatorias, ya que se preparan con jamón de bellota (relleno insuperable garantizado).

Jamón cortado al estilo E.G.O

Y lo exótico también es asombroso. Muestra de ello son las tortitas de maíz, sashimi de atún y mayonesa chipotle, uno de esos entrantes que no puedes dejar de pedir cada vez que vuelves. El tataki clásico adquiere una forma horizontal con el roll de aguacate con tartar de salmón, de sabor suave y fino.

El imprescindible absoluto es el jamón cortado al estilo E.G.O, un bellota con cuatro años de curación que promete un sabor polifacético y una experiencia sin parangón. Se pueden degustar notas de mantequilla, tierra, nueces… e incluso maridarlo con fresas. Es una experiencia de una audacia insuperable.

Jardín interior de Ana La Santa.

Dejando a un lado sus fascinantes tapas, Ana la Santa también sorprende cuando entra en materia. Entre sus platos más creativos se encuentra el delicioso bocadillo de calamar con ali oli negro y pan de cristal, también conocido una sofisticada versión del bocata más aclamado por quienes vivimos en la capital.

La fase dulce tiene un matiz diferente en este restaurante: la torrija con helado de caramelo salado es una especialidad jugosa y que huye de lo empalagoso.

Torrija con helado de caramelo salado

Ana la Santa tiene pocas cosas que no pueda ofrecerte. Si no es una cena de las que marcan un antes y un después en tu historia culinaria, entonces será una copa con vistas a una de las plazas más bonitas y exclusivas de la ciudad.

No olvidemos que, a veces, en los lugares mágicos como Madrid, los mejores escondites están a plena vista.

Nota: Ana la Santa pertenece al grupo En Compañía de Lobos, donde también puedes conocer el fascinante Bosco de Lobos.